Por:  Helen Quejada

Respirar es un acto instintivo y espontáneo que realizamos a diario, la mayor parte del tiempo de forma inconsciente, pero cuando tomamos conciencia de él y creamos una forma personal de hacerlo, nos proporciona felicidad, relajación y bienestar, siendo el acto que nos recuerda a diario que sin él no podemos vivir.

Eso es para algun@s de nosotr@s la danza, una manifestación diaria de supervivencia, un lenguaje individual que creamos y compartimos con el otro por medio de diversos símbolos, permitiéndonos comunicar nuestras emociones, estados de ánimo, deseos, represiones, miedos, preocupaciones, anhelos, alcances, éxitos…

Hoy en día Respirar Danza  se ha convertido en una decisión consiente, que inconscientemente  me recuerda diariamente que estoy viva, es el motor que mueve los diferentes ejes de los que soy parte. Es una renovación constante de energía que me motiva a crear espacios de bienestar personal y colectivo. Es un acto que aunque parece netamente orgánico requiere de una preparación,  conocimiento y repetición para alcanzar sus mejores  beneficios.

Es por eso que hoy sin duda alguna, puedo decir  Yo Respiro Danza y tú??